Italia: Road Trip de Verona a Roma (segunda parte)

¡Bienvenidos un domingo más, con la primera entrada de Agosto! Aquí viene la segunda parte de este Road Trip, que tanto nos gustó. Esta vez visitaremos PisaRoma, la Ciudad Eterna. ¿Vienes a visitarlas con nosotros? ¡Comenzamos!

Antes de nada debo decir que mientras este nuevo post está siendo subido, yo estoy volando dirección Cuba. No ha sido posible editar las fotos, pero ahí van, aunque sea sin edición. Al natural. Cuando vuelva, las pondré bonitas, y añadiré las que falten. No quería fallar un domingo, pero a veces es difícil, teniendo en cuenta que el domingo es el día que realizo la edición de fotos, y éste no estaré. ¡Prometo arreglarlo!Italia Low Cost

 

DÍA 5: De Florencia a Roma,

pasando por Pisa

¡Buenos días con alegría! Hoy toca moverse de nuevo. Nos vamos de Florencia con dirección a Pisa, con la sensación de no haber disfrutado bien la ciudad. ¡Así que tendremos que volver! Y mas pronto que tarde, a poder ser 👅

Pisa y Florencia están separados por menos de 100 kilómetros, pero tardamos más o menos una hora y media en llegar. No hemos madrugado, para que engañarnos. Todo el día pateando ciudades, y a nosotros que nos gusta dormir… además, estamos de vacaciones, así que hemos salido de Florencia a las 10 de la mañana, y estamos sobre las 11 y media en Pisa. Lo primero que hacemos al llegar es buscar un aparcamiento. Aunque no lo parezca, la ciudad tiene cerca de 100.000 habitantes. Recuerdo que la primera vez que este la estuve en ella, mi sensación fue que era un pueblo pequeño, pero nada más lejos de la realidad. El problema es que solo vamos a conocer lo más famoso de Pisa, y eso está todo concentrado en un mismo punto que se recorre en un rato. Bueno a lo que vamos, que tenemos que aparcar. Justo al lado de la Piazza dei Miracoli hay un parking que suele estar bastante lleno, pero esta vez tuvimos suerte. Nuestra intención es estar un par de horas, así que no nos importa pagar por aparcar y dejar de buscar sitio a las afueras, perdiendo tiempo en volver al punto más famoso de la ciudad. Por menos de 3€ cada uno, hemos aparcado a 5 minutos andado del lugar más simple y bonito de toda Italia. Atravesamos un pequeño mercado caminando, en el cual puedes comprar souvenirs a buen precio (hay que regatear un poco, jijiji), y llegamos a ese extenso campo verde con monumentos blancos que tantas veces hemos visto en fotografías o en televisión. La Plaza está dominada por cuatro edificios (todos ellos religiosos):  el más conocido, la Torre inclinada de Pisa, el Duomo, el Baptisterio y el cementerio. Empezamos por el primero, la famosísima Torre de Pisa, que no es más que el campanario de la Catedral. Si quieres subir, deberías comprar la entrada online, pues las colas son inmensas. Puedes adquirirla en este enlace y tienes distintas opciones: si lo que quieres es subir solo a la Torre, el precio es de 18€ (e incluye la Catedral, que por si sola es gratuita). Pero si lo que quieres es entrar al Baptisterio, el Cementerio o el Museo, tienes la opción de pagar 5€ por el primer lugar, 2€ más si quieres entrar en dos de ellos, o añadir otro euro por entrar al tercero. 8€ en total por visitar los tres lugares. ¡Por cierto! No olvides que está prohibido pisar el jardín! Que además está muy, muy bien cuidado. Respeta todos estos espacios 😉

IMG_20190803_185628_857.jpg

La Torre es tan famosa por estar inclinada, y aunque al principio supuso un problema, a día de hoy es todo lo contrario para los pisanos (¡menudo gentilicio!), pues supone una parte importante en cuanto a ingresos en la ciudad. Debido a su inclinación, estuvo casi 20 años cerrada al público mientras era estabilizada. A día de hoy, se considera Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Pero, ¿por qué está tan inclinada? Casi desde que se empezó a construir, la torre se «torció», y a pesar de ello continuaron con su construcción hasta finalizarla. Esto es debido a que Pisa se asienta sobre un terreno pantanoso, además de que los cimientos de la Torre son escasos. Y a pesar de los terremotos que han asolado la ciudad, ésta sigue en pie. ¿Por qué? Por un fenómeno  conocido como interacción dinámica entre suelo y estructura (DSSI). No te lo voy a explicar, solo nombrarlo jajaja.

IMG_20190803_185817_163.jpg

Además de la ya famosa Torre, dentro de la Piazza dei Miracoli de Pisa, tenemos la Catedral de Santa María Asunta, también construida en mármol blanco para dar majestuosidad al edificio. Su puerta principal (de cobre), o su púlpito tallado son sus principales bazas a la hora de la visita, además del edificio en si, claro está. También tenemos en esta plaza tenemos el Baptisterio, dedicado a San Juan Bautista. También está edificado de forma independiente y un poco inclinado (0,6 grados), aunque no sea visible a nuestros ojos. Y por último tenemos el lugar (quizás) menos visitado, el Cementerio. Siendo francos, nosotros tampoco lo visitamos, aunque me ha quedado esa espinita de no haberlo hecho. No sé si fue por falta de tiempo, o que en ese momento no conocía las visitas a los Campos Santos como algo cultural, pero el caso es que no lo visitamos, ¡aunque prometo hacerlo en un futuro no muy lejano!

IMG_20190803_190030_255.jpg

Y después de pasar un par de horas explorando Pisa (bueno, explorando lo más conocido de Pisa…), ciudad de nacimiento de personajes ilustres como Galileo Galilei o el conocido cantante Andrea Bocceli, nos damos una vuelta por el mercado, donde hacemos unas comprillas de lo que viene siendo regalinchis y volvemos al coche para seguir dirección Roma. El camino es largo, unas 4 horas en coche por la costa. Podemos ir por el centro de Italia, pasando por Florencia de nuevo, pero la diferencia son unos 20 kilómetros solamente. Por eso tenemos intención de ir por la costa, para así conocer pueblos bonitos de la región más conocida del país: la Toscana. Nada más empezar el camino, paramos en un área de servicio a comer y repostar, y ahí recibo una llamada del alojamiento de Roma, para indicarnos que tenemos que recoger las llaves antes de las 21:00 horas como muy tarde, pues si llegamos más tarde no habrá nadie para recibirnos y no tendríamos alojamiento hasta el día siguiente. Al traste los planes de visitar pueblos costeros, pero no importa. Teníamos en mente visitar San Gimignano, un pueblo situado sobre una colina que conserva un aire de Edad Media en todo su entorno, Monteriggioni, otro pueblecito medieval o Siena, ciudad fundada por los hijos Remo (hermano de Rómulo, fundador de Roma). Tendrá que ser en otra ocasión, pero no importa, porque ya tenemos en mente realizar un viaje exclusivamente por la Toscana 😎.

Y por fin, tras 4 horas, llegamos a Roma. Tenemos que dejar el coche en un parking de la estación de Termini, la más importante de la ciudad. Llegar hasta allí es una odisea… ¡conducir en Roma es horrible! Nadie respeta nada, ni un ceda o stop, los semáforos parecen de adorno, en las rotondas hay que entrar en modo «sálvese quien pueda»… si conducir no es tu fuerte, o no te gusta especialmente, es mejor que no conduzcas en esta ciudad. Bien, una vez hemos llegado a Termini y entregado el coche (que revisan perfectamente para ver si tiene algún golpe a mayores de los que están anotados, por eso es importante que hagas un vídeo el primer día), tenemos que ir en dirección al alojamiento. Es tarde, y si llegamos mucho más tarde, no tendremos quien nos entregue las llaves. Nos hemos alojado en Elisabeth Apartments, un apartamento enorme a 10 minutos andando del Vaticano. La dueña nos ha estado escribiendo por WhatsApp todo el camino para preocuparse por nosotros, dándonos indicaciones de cómo recoger las llaves o quién nos las entregará. El problema ha sido que le dijimos que llegaríamos sobre las 17:00 pm, por eso nos tendrán que entregar las llaves los padres de la chica (que no hablan ni inglés ni español), y no pueden hacerlo más tarde de las 21:00 pm. Ha sido culpa nuestra, ya hacen un gran esfuerzo dándonos las llaves a deshora. Afortunadamente aunque estemos lejos del alojamiento, desde Termini tardamos media hora en metro, así que llegamos a tiempo. Efectivamente nos esperan los padres de la dueña, igual de encantadores que ella, aunque nosotros ni hablamos italiano y ellos no hablan nada que no sea su lengua materna, pero nos vamos entendiendo. Nos dan las llaves, nos explican un poco como pueden, y les damos las gracias por esperarnos. El piso es enorme, está súper limpio y a solo 20 minutos andando del Vaticano. Estamos encantados, no podíamos haber elegido mejor. Y por solo 95€ cada uno, un precio bastante bueno. Personalmente me he alojado en otros apartamentos en Roma que estaban bastante bien también, pero a día de hoy han dejado de estar disponibles para su reserva, por tanto no puedo daros referencias. ¡Ah! Con tanta prisa no hemos hablado del precio del metro en Roma. Nosotros apenas lo usamos en ninguna de las ocasiones en que estuvimos en la ciudad. Es pequeño (tiene tres líneas), aunque si que es cierto que llega a casi todos los puntos importantes, pero no es necesario usarlo prácticamente para nada. Caminando puedes llegar casi a cualquier lugar sin grandes distancias. Además, pasear por Roma debería ser obligatorio. En todas las calles descubres edificios o lugares impresionantes. De todas formas, si necesitas utilizar el metro, el billete sencillo cuesta 1,50€, pero si lo que quieres es un billete de 24 (7€) o 48 horas (13€), también tienes la opción. A nosotros no nos pareció necesario más que pagar el día de llegada o en algún que otro momento que estábamos cansados. Como máximo lo usamos 5 veces en los 4 días. Como apunte decirte que en Roma hay tan pocas líneas de metro debido a que cada vez que quieren abrir una nueva, encuentran excavaciones o restos arqueológicos que les impide continuar 😲😲. Y después de esta pequeña introducción al metro romano, nos hemos quedado en el alojamiento, siendo ya muy tarde. Así que solo nos queda cenar algo y dar un pequeño paseo por los alrededores, llegando al Vaticano para verlo de noche. Y así concluimos el día de hoy, nos vamos a descansar para disfrutar de la ciudad al día siguiente.

 

 

DÍA 6: Roma

Estamos en la ciudad más famosa del país, capital de la región y el lugar más rico (arquitectónicamente hablando) de toda Italia. Tenemos cientos de cosas para ver, lugares que visitar, fotografías que hacer… ¡estoy in love con Roma! Volvería una y mil veces. Vamos a empezar visitando el Vaticano, el lugar que nos queda más cerca de nuestro alojamiento. Hemos comprado el ticket online, en este enlace aunque tienes este otro este enlace (en español) para que entiendas el tipo de entrada que debes comprar, consejos para ir o cualquier otro tipo de información que te sea necesaria. La entrada tiene un precio de 21€ (17€ del ticket, y 4€ por comprarla de forma anticipada). Te recomendamos encarecidamente que lo compres por Internet, sino cuando llegues vas a encontrar una cola que da la vuelta a todo el museo. Literal (te lo enseñaremos en las historias de Instagram). Para comprar el ticket tienes varias opciones, la más básica y primera opción que deberías hacer es visitar el Museo y la Capilla Sixtina, en la que puedes añadir, por 4€ más, una audio-guía. Eso queda a tu elección. Nosotros llevábamos toda la información descargada de Internet, no la necesitamos. Lo que también te recomendamos es que vayas pronto, a pesar de tener entrada es probable que si vas más tarde de las 09:30 am, tengas que hacer cola para entrar, debido a la gran cantidad de gente que hay. Y si no la has comprado con antelación y tienes que hacer la cola, vendrá un montón de gente a ofrecerte tickets «piratas», que no deberías comprar… lo que no hemos dicho es que también tienes la opción de entrar G-R-A-T-I-S. Increíble, ¿no? El último domingo de cada mes (siempre que no coincida en fecha festiva) el museo abre sus puertas (por las mañanas) de forma totalmente gratuita. La gente empieza a hacer cola por la noche, así que es probable que si llegas tarde ya no tengas opción a entrar, o si en caso de poder hacerlo, pierdas toda la mañana en la cola, y la tarde en el museo. Claro que es una buena opción (a los lowcosteros nos encanta lo gratis 🤑), pero si tu visita a Roma es corta, es mejor que te gastes el dinero en la entrada y puedas disfrutar con más tranquilidad del resto de la ciudad.

20160317_110835.jpg

¿Qué puedes hacer en el Museo del Vaticano? Principalmente tienes que saber que, para visitarlo correctamente, tienes que emplear mínimo una mañana. Es enorme, con arte y cultura por todos lados. Dejo al margen lo que cada uno piense de la Iglesia y de este «poderío» que demuestran en el Vaticano… por supuesto, la joya de la corona es La Capilla Sixtina ,pintada por Miguel Ángel (pincha para leer su historia en Wikipedia). La imagen más conocida de esta sala es La Creación de Adán, esa en la que se ve al «creador» a punto de tocar con un dedo a un hombre para darle vida. Diría que mucha gente entra únicamente para ver esta sala, ciertamente impresionante, aunque hay mucho más, como obras de Caravaggio u otras obras también de Miguel Ángel. Cabe decir que aquí no se pueden hacer fotografías y apenas puedes pasar en ella 5 minutos, aunque en el resto del museo puedas ir más tranquilo. Pero ya sabéis que este blog no está para dar datos históricos ni culturales (ya he dicho que para eso tenemos wikipedia), así que simplemente os contamos como entrar a los Museos Vaticanos, y qué es lo más importante que podrás ver. Si quieres saber de su historia, te hemos dejado el enlace wikipedil (patrón de los desinformados 😝).

Salimos tarde de los Museos Vaticanos, y comemos en un puesto callejero (el primero que pillamos) para poder seguir la visita. Nos dirigimos ahora a la Plaza de San Pedro, el corazón del estado. Porque a pesar de estar en el centro de Roma, el Vaticano es un estado independiente de sólo 0,44 metros cuadrados (es uno de los seis microestados de Europa como también lo son Andorra Mónaco). La Plaza de San Pedro es una de las más bonitas y grandes del mundo. A pesar de ser un espacio abierto, a día de hoy hay que pasar por arcos y detectores para poder acceder, está muy, muy controlada. La plaza está llena de columnas que simbolizan el abrazo de acogida de la Iglesia al visitante. Es normal que esté llena de monjas, curas, o gente de peregrinación, esperando ver al Papa en una ventana dando una misa, o en la misma plaza (las audiencias tienen lugar los miércoles, por si quieres verlo). Dentro de ella tenemos la Basílica de San Pedro, edificio central del Vaticano. Esta basílica cuenta con el mayor espacio interior de una Iglesia cristiana en todo el mundo. Entrar en la Basílica es gratis y es totalmente digna de ser visitada, aunque las colas también son enormes. La misa empieza a las 08:30 am a diario, y mucho antes de que comience ya hay una cola inmensa. De hecho, nosotros nunca hemos podido entrar, porque no nos apetece perder medio día solo para esto. Para gustos los colores. Si tú tampoco puedes acceder a ella, puedes hacer una visita virtual en su web, que no es lo mismo, pero tampoco está mal. Es una visita muy completa, aunque yo quitaría el audio si la haces… jajajaja. Pero si lo que quieres es subir a la cúpula de la Basílica, también podrás hacerlo, aunque (ahora si) previo pago. Son más de 500 escalones por 8€. No, tampoco hemos subido. Son demasiadas horas de espera. Seguro que las vistas son impresionantes, pero no hemos tenido tanto tiempo en Roma para «gastarlo» aquí. ¡Continuamos! Otra de las cosas que puedes ver es la Necópolis Vaticana, situada en el subsuelo de la Basílica, y es también de pago. Por 13€ puedes ver las tumbas de anteriores Papas como Juan Pablo II, aunque para poder entrar deberás enviar un e-mail antes (con bastante antelación a tu visita) a la dirección scavi@fsp.va, tienes las instrucciones en este enlace. No es habitual un proceso así, pero es lo que hay. Nosotros tampoco hicimos esta visita, no somos creyentes y no nos parecía interesante… ¿entraría si volviese? Personalmente si, tampoco soy musulmán y me gustaría entrar en una mezquita. No por religión, sino por cultura. Y ya por último tenemos las Villas y Jardines Vaticanos, otra visita que nosotros nos saltamos. ¿Para qué mentirte y falsear fotografías? Te explicamos lo que sabemos desde nuestra experiencia, y lo que hemos buscado o de lo que nos hemos informado. Creo que en una primera visita a Roma, o visitas muy cortas, todos estos lugares del Vaticano se antojan demasiado. Como ya hemos ido en tres ocasiones, en la cuarta (que ya conocemos la ciudad bastante bien), podremos ver estos lugares. Las entradas para los Jardines o Villas se compran directamente en taquilla por un precio de 12€ y se necesita reserva previa. Más información en su web oficial (disponible en español).

20160317_110758.jpg

Y después de esta mañana completa en el Vaticano, nos dirigimos al Castillo de Sant’Angelo o Castel Sant’Angelo, una fortaleza en un margen del río, a muy poca distancia del Vaticano. De hecho, una vez hemos salido de este microestado, continuamos andando recto y vemos el Castillo al fondo, no tiene pérdida. También es conocido como Mausoleo de Adriano debido a que el emperador pretendía darle ese uso para él y su familia una vez fueran llamados a la órden. Puedes adquirir tu entrada en este enlace por 16€, aunque la visita no merece mucho la pena si tu tiempo es limitado. No recomendamos entrar, francamente. En los alrededores del Castillo puedes encontrar puestos muy interesantes, con láminas de Roma y souvenirs un poco más atípicos. Si quieres hacer las típicas compras de llaveros y bolas de nieve, no te adelantes, luego te contamos el lugar más barato para comprarlos.

castel.jpg

Vamos ahora a la Plaza Navona, una de las plazas importantes de la ciudad. Como hemos decidido que no usaríamos el metro más que lo imprescindible, continuamos haciendo el recorrido andando. En menos de 10 minutos estamos en esta plaza de estilo barroco, con sus tres fuentes que la dotan de majestuosidad y belleza. Esta tres fuentes son la Fontana dei Quattro Fiumi, Fontana del Moro y la Fontana de Nettuno. Aquí puedes relajarte mientras te hidratas en alguna terraza, para poder seguir la ruta romana. Al lado de esta plaza tenemos el Panteón de Agripa, el edificio mejor conservado de la antigua Roma. En el interior se encuentran las tumbas de numerosos Reyes y del artista Rafael (el pintor, no el que canta…). Es curioso que la entrada fuera gratuita durante tanto tiempo, y no hubiera que hacer cola para entrar, no siendo un lugar excesivamente grande. Debe ser que nos gusta pagar, porque si no, no lo entiendo. Lugar de pago=colas inmensas. ¿Gratis?=se accede con relativa facilidad. Al margen de esto, entrar en el Panteón de Agripa es imprescindible, aunque desde el año pasado haya que pagar 2€ por entrar. Qué raro 😑. En la bóveda que hace de techo hay un «agujero» de 9 metros de diámetro que hace que esté entrando el sol constantemente. ¿Y la lluvia? También entra, claro. Pero hay unos agujeros muy pequeños en el suelo que hacen que sea filtrada, para que no se inunde. De aquí continuamos nuestra visita al Área Sacra, la zona donde se encuentran las ruinas de los templos más antiguos que se conservan en Roma. La zona está llena de gatos, unos gatos tan importantes que hasta tienen su propia web. Estamos en contra total y absolutamente del maltrato animal, pero especialmente con los animales callejeros. ¡Ay que quererlos! 💜. Esta zona es especialmente bonita de noche, iluminada de forma estratégica para hacerla mucho más enigmática. Es una zona abierta y gratuita, puedes ir cuando quieras.

Tenemos tantas ganas de ver algo, que vamos volando al siguiente punto: la Fontana de Trevi, la fuente más grande y bonita de la ciudad, a unos 10 minutos caminando del Panteón. Cuenta que si echas una moneda volverás a Roma, tirando dos encontrarás el amor y tirando tres te casarás… la moneda se lanza con la mano derecha sobre el hombro izquierdo. De todas estas monedas que echa la gente, se extraen un millón de euros que se utilizan con fines benéficos. Ni tan mal. Deberías saber que la fuente está atestada de gente, te va a ser complicado acercarte o hacer una foto digna. Y como curiosidad te contamos que hay una ventana en la fachada de detrás de la fuente que no existe, es decir, está pintada. No sé hasta que punto esto es leyenda o no, pero dicen que el arquitecto soñó que su hija se suicidaba tirándose por esa ventana, y por eso decidió pintarla. Leyenda o no, la realidad es que la venta nunca fue construida, aunque apenas se nota la diferencia. Y así como el que no quiere la cosa, se nos ha hecho de noche, así que vamos a hacer una de las últimas visitas del día, que no es otra que la famosa Plaza de España. Siempre que voy a Roma, acabo en esta plaza sentado un buen rato, de día o de noche. Tiene unas escalinatas muy grandes donde la gente se concentra para charlar, o simplemente pasar el tiempo descansando. En la cima de las escaleras tenemos la Iglesia de Trinità dei Monti, con entrada gratuita. No suele entrar mucha gente, puedes pasarte para verla, aunque no es una visita muy interesante. Para saber más, entra en su web oficial. Y como hoy nos apetece cenar sentados en un barrio típico, nos vamos al Trastevere, aunque esté en la otra punta y necesitemos transporte. No importa, cogemos el metro y nos vamos hacia allí para cenar en este barrio y así conocerlo. No sé si fue por el frío, porque había poca gente o porque era tarde, pero tengo que decir que el barrio no me gustó. De hecho cenamos en una pizzería y nos fuimos a descansar, no anduvimos mucho más allá para conocer el Trastevere. Y esa fue la única vez que estuve allí, nunca he vuelto en mis siguientes visitas a Roma. Quizás debería darle otra oportunidad, o ir cuando haya sol, a saber… y así finalizamos el día de hoy. Estamos a tomar por saco muy lejos del alojamiento, así que cogemos el (creo que) tercer metro del viaje. No teníamos pensado hacerlo, pero el cansancio hace mella en nosotros, y por 1,50€ tampoco nos vamos a arruinar… una vez llegado, nos damos una ducha refrescante y a descansar, que mañana es un día largo.

20160317_125454.jpg

20160317_125954.jpg

 

 

DÍA 7: Coliseo, Foro y Palatino

¡Toca madrugar! Mañana nos vamos, y todavía nos quedan muchas cosas por ver y hacer. Hoy también cogemos el metro, ya que estamos muy lejos de nuestro siguiente destino, que no es otro que el Coliseo de Roma. Vamos a contarte un truco, si es que no llevas las entradas compradas desde casa (que por cierto, puedes adquirirlas en este enlace). Un único ticket sirve para entrar al Coliseo, Foro Palatino, por tanto con que la compres una vez, es suficiente. Cuando la gente piensa en esta visita, lo primero que hace es ir al Coliseo, donde suele haber tanta cola, que aunque tengas entrada, vas a tener que esperar un buen rato. Si tienes que comprarla allí, tendrás que armarte de paciencia o madrugar mucho, por eso la mejor opción es que la compres en el Foro o Palatino, que suelen estar mucho menos concurridos. No esperamos para entrar ni cinco minutos, no había nadie haciendo cola en ninguno de los dos lados. Y luego con esa entrada, ya puedes dirigirte al Coliseo. Y después de este consejiti, vamos a hablar un poco del lugar. Entrar tiene un coste de 12€ (más 2€ por comprarla online), bastante barato para todos los lugares que visitas. Es una visita altamente recomendable de Roma. No podrás decir que estuviste en la ciudad si no entras al Coliseo, siendo éste el anfiteatro más grande construido durante el Imperio Romano. A día de hoy es algo totalmente turístico y una de las Siete Maravillas del Mundo Moderno (vaya, me faltan 6…) En el Coliseo se celebraban los famosos (y atroces) juegos romanos. En ellos, se hacía luchar a gladiadores de forma cruel, para deleite del público. Una de las películas que mejor lo representa es Gladiator de Ridley Scott. Si todavía no la has visto, aquí tienes su trailer en español. Más de 2000 gladiadores murieron en estas batallas, aunque (afortunadamente) los últimos juegos fueron celebrados hace más de 15 siglos. También se dice que a veces era inundado para hacer representaciones de batallas navales, aunque a día de hoy todavía no ha podido ser demostrado. Tanto el Coliseo, como el Foro o el Palatino abren a las 08:30 am, así que para no perder el día, es mejor que estés allí antes de que abra y así hacer tu visita lo antes posible.

colo.jpg

IMG_20161203_184234.jpg

Salimos del Coliseo (porque hemos comprado la entrada online, claro) y vamos al Palatino, a escasos metros andando. Según la mitología romana, en este monte vivía la loba que cuidó de Rómulo y Remo. Suponemos que conocéis la historia, pero si no es así, deberías leerla para saber de qué hablamos. En el Palatino tienes numerosos lugares importantes que deberías ver, aunque como no lleves una audio-guía, no te enterarás de mucho. Tienes un montón de ellas en este enlace de forma totalmente gratuita. Y desde este monte puedes hacer las mejores fotografías del Coliseo (¡nos encantan las pictures!). Y finalmente nos queda el Foro, lugar en el que se hacía antiguamente vida pública y religiosa en Roma, y otro de los lugares en los que necesitarás audio-guía para enterarte de absolutamente todo, aunque si vas sin ella, es igual de mágico. Puedes pasarte horas en él, aunque si no tiene mucho tiempo necesitas al menos una para disfrutarlo. Tiene cientos de puntos importantes, como la Via Sacra (calle principal de Roma) o el Arco de Tito (Arco del Triunfo). Otro de los Arcos del Triunfo está justo al lado del Coliseo, el Arco de Constantino, fácilmente reconocible, no tendrás problema en verlo. ¡Ah! Si no quieres hacer estas visitas el mismo día, no te preocupes: el ticket te vale para dos días seguidos. Dicho queda.

20160317_135501.jpg

20160318_114758.jpg

20160317_141749.jpg

Vamos a continuar nuestro tour romano, después de salir del Coliseo, Foro y Palatino (dónde hemos estado toda la mañana), nos hacemos una pequeña caminata de 15 minutos para ir a la famosa Boca della Veritá, una enorme máscara de mármol sobre la que corren muchas leyendas. La más importante, es que un hombre que no confiaba en la fidelidad de su mujer, llevó a ésta ante la Boca de la Verdad para que respondiese a la pregunta de si había estado en los brazos de otro hombre, a lo que ella tendría que responder la verdad, con la mano dentro de la boca. De mentir, la boca se cerraría y la mujer perdería su mano.Pero muy astutamente, ella fingió un desmayo para que un hombre la cogiese, hombre que, casualmente, era su amante. Por tanto la mujer ya pudo afirmar que solo había estado en los brazos de su marido, y de ese hombre que la acababa de coger. Desde luego, la leyenda es ingeniosa. Pues bien, la Boca se encuentra en la pared de una Iglesia llamada Santa María in Cosmedin. Hay que hacer una pequeña cola para fotografiarse con la mano metida en su boca, pero no es mucha la espera. Antes era gratis hacerlo, aunque a día de hoy (según se indica en Internet), hay que pagar 2€. No sé si es cierto, así que si vas a ir próximamente, ¡confírmanoslo! Por cierto, para ir hacia la Boca de la Verdad, lo hemos hecho a través del Circo Máximo de Roma, un recinto abierto en el que se celebraban los juegos públicos, como son las carreras de cuadrigas. Hace falta echarle mucha imaginación para ver lo que algún día llegó a ser, ya que a día de hoy no es más que un campo alargado con unos restos bastante decepcionantes.

IMG_20190803_190645_584.jpg

A escasos 10 minutos andando tenemos uno de los edificios más majestuosos de Roma, el Monumento a Víctor Manuel II, un impresionante monumento de mármol blanco con una terraza enorme. Aquí se erige la Tumba al Soldado Desconocido, algo muy popular que suele haber en muchas ciudades europeas. Entrar al monumento es gratis, aunque si quieres entrar al museo y subir en el ascensor, tendrás que pagar 10€ que (personalmente), creo que no merecen la pena.

Y de aquí nos vamos a comer algo, exactamente un bocadillo de un súper, para no perder tiempo, jajaja. Mientras comemos, caminamos hacia el siguiente punto, que no es otro que el Mercado de Trajano, el primer centro comercial cubierto del mundo. A día de hoy se ha convertido en un museo, puedes adquirir tu entrada en este enlace por 17€. Una entrada cara para una visita poco interesante. Continuamos caminando después de ver el Mercado de Trajano (por fuera, claro) para ir hacia la Piazza Colonna y ver la Columna de Marco Aurelio. construida para celebrar la victoria del emperador durante las guerras marcomanas. La columna no tiene mucho más, llegas, la ves, la fotografías, y nada más allá. Por eso seguimos, retrocediendo hacia atrás, para visitar algo que no sabía en que momento del viaje cuadrar. Y tenemos que caminar sobre lo ya caminado, siendo este otro de los momentos en los que usamos el transporte público, y cogemos un autobús, para no perder mucho tiempo, ya que estamos a más de media hora caminando. El lugar al que queremos llegar es el Monte Aventino, un lugar en el que encontramos una curiosa puerta verde, a través de la cual podemos mirar por su cerradura para ver 3 países distintos a la vez: el interior pertenece a Malta (la villa pertenece a una de las órdenes militares más antiguas, la Orden de los Caballeros de Malta), de fondo podemos ver la Cúpula de San Pedro del Vaticano, e Italia, lugar en el que nos encontramos pisando en ese preciso momento. Muy poca gente conoce este lugar, además está bastante alejado de todo, por eso es probable que llegues y no haya absolutamente nadie. Justo al lado, tenemos el Jardín de los Naranjos, lugar para descansar un rato (si vas de día, claro). Este lugar no es de visita obligada, a no ser que vayas con tiempo, aunque he de decir que ya he ido en dos ocasiones, pues me encanta esa absurda sensación de estar viendo 3 países distintos. Y de aquí nos vamos al sitio más alejado de todos, Las Catacumbas de San Calixto, lugar al que es casi obligatorio ir en transporte público. Es muy tarde, y tenemos que llegar antes de las 17:00 pm, así que decidimos coger un Uber, que nos llevará en un satiamén y tampoco es excesivamente caro. Unos 5€ cada uno. Para una emergencia, está bastante bien. Una vez hemos llegado, tenemos que ir a las taquillas a recoger nuestras entradas, que ya hemos pagado previamente en su web oficial por un precio de 8€. Es tarde, y precisamente hoy no hay mucha gente. ¿Por qué hemos escogido estas catacumbas y no otras? Azar, y que en ella está la tumba de Santa Cecilia, Patrona de los Músicos, y me producía curiosidad ir. Pero habríamos ido a cualquier otra sin ningún problema. El recorrido de las catacumbas se hace en español, y si no vas abrigado, puede que pases frío (la temperatura baja por los pasadizos). La visita nos gustó mucho, el guía explica con todo lujo de detalles cada uno de los lugares por los que caminamos. Obviamente no se ve ni la mitad de lo que hay, pero eso pasa en todas las catacumbas romanas (y del mundo, diría yo). La visita no es muy larga, pero se pierde mucho tiempo yendo hacia allí, y se nos ha hecho muy tarde. Por eso cuando acabamos, salimos pitando (pillamos justo el autobús que nos llevaba hacia el centro) hacia la zona del Coliseo, para verlo iluminada de noche. También queremos ver el Monumento a Victor Manuel II o la Fontana de Trevi… todos esos lugares de noche, son impresionantes. Tenemos que hacerlo todo rápido, son muchas cosas para las pocas horas del día que nos quedan. Pero lo conseguimos, justo antes de cenar. Esta vez nos despedimos cenando cerca de la Fontana, en un restaurante que tenía la carta en la puerta, para no llevarnos sustos, jijiji. Ya después de cenar, un paseo tranquilos hasta el alojamiento, pasando por el Vaticano (¡también queremos verlo iluminado!) y a dormir, que mañana hay que hacer las maletas para ir de vuelta a casa, que es lo único a lo que tenemos tiempo el octavo día.

IMG-20161128-WA0030.jpg

 

DÍA 8: Vuelta a casa

Nos levantamos pronto para darnos una ducha y recoger nuestras cosas. Nuestro vuelo sale a las 11:35 de la mañana, por tanto salimos del alojamiento sobre las 08:00 am aproximadamente, para poder coger el autobús de las 08:50 horas, y es mejor ir con tiempo. Tenemos que ir a Termini a coger ese autobús, de la compaía Terravisión, la mejor forma de ir hacia el aeropuerto. En solo 40 minutos y por 5,80€ estamos en Ciampino. Somos conscientes que nos han quedado muchas cosas por ver, como el Ara Pacis, las Termas de Caracalla, Villa Borghese, el Gianocolo, Campo dei Fiori… ¡Roma es un no parar de visitas! Necesitaríamos un par de días más, por lo menos. ¡Ah! Y no nos olvidamos. Unas líneas atrás, os dijimos que para comprar souvenirs, había un lugar donde encontrarlos baratos. Ese lugar es Via Leone IV, la calle que unía nuestro apartamento y el Vaticano. Por las mañanas montaban unos puestos, algo así como un mercado, con llaveros, imanes, bolitas de nieve o abridores por 1€ cada pieza. Realmente barato. Yo, que colecciono bolitas de nieve de cada lugar al que voy, nunca la encontré por menos de 3,50€.

Y por supuesto, no podemos dejar de hablar de algo que nos encanta: los free tours. En Roma tienes varios muy interesantes. Nosotros hicimos este tour de Civitatis (¡nuestra página top de actividades, tanto gratuitas como de pago!) en el primer viaje a la ciudad, y este de la Roma Clásica en la segunda visita. También puedes hacer este tour por el barrio del Trastevere y contarnos qué tal te fue, para nuestra futura visita a Roma.

¡Así despedimos nuestro Road Trip por Italia! Ha sido intenso, y no ha salido del todo como esperamos, ya que no hemos podido ver algunos pueblos que teníamos en lista, pero aún así, estamos contentos con el resultado.

 

¡Y con esto nos despedimos por hoy! Si tienes cualquier duda o consulta, puedes escribirnos a robertourstravels@hotmail.com y te contestaremos lo antes posible. Recuerda que a diario subimos fotos nuevas a Instagram, o contenido a Facebook, ampliando información sobre el viaje de la semana. Nos leemos en la siguiente entrada. ¡Feliz semana! 😉